Desde la Plataforma El Veril Está Vivo, queremos comunicar que nos hemos visto más que obligados a presentar recurso contra la sentencia de la canalización de El Veril de San Bartolomé de Tirajana.
Según esa sentencia, todo el patrimonio arqueológico inmueble canario que no haya sido declarado bien de interés cultural, puede ser destruido.
Cuevas, casas de piedra seca, cenobios, rondas de vigía, todo puede ser destruido según el juzgado de lo contencioso nº 4, de Las Palmas de Gran Canaria, si no tiene la calificación especial de bien de interés cultural (BIC).
Para la juez, sólo una parte de la ley de patrimonio histórico tiene valor, y sólo hay que proteger una parte de nuestra memoria histórica. El resto de la ley, aquellos artículos que protegen los vestigios arqueológicos que no sean BIC, no se deben cumplir.
Para que toda la ley de patrimonio histórico se aplique y se obligue a la protección de todos nuestros valores, incluidos todos los del Veril de S. B. de Tirajana, hemos tenido que presentar recurso de apelación a la Sala de lo Contencioso Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Canarias contra la sentencia del 7 de febrero de 2019 del procedimiento nº 227/2017, sobre la licencia de la canalización de El Veril, T.M. de San Bartolomé de Tirajana.
Exactamente, tenemos cuatro procedimientos judiciales abiertos sobre El Veril y las licencias dadas, tanto la rotonda de acceso, el planeamiento de la pieza de suelo, como de sus valores patrimoniales.
Asimismo, afirmamos que seguiremos vigilantes en todos aquellos actos administrativos, exigiendo las máximas garantías y el cumplimiento del marco normativo sectorial, las leyes canarias, la constitución, y los tratados internacionales.
Es inadmisible que en función de intereses privados se deje de respetar las leyes y los valores que estas protegen para el bien general.
Resaltamos que las instituciones públicas están para defender lo público y los intereses de todos y no los privados, lo que deben tener en cuenta en los expedientes administrativos que aún se están tramitando y que deben resolver haciendo que se protejan todos los elementos arqueológicos existentes en El Veril.