- Este curso se desarrollará en la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, a partir de la próxima semana
- Esta iniciativa tiene como objetivo formar a especialistas en esta materia para contribuir a la problemática de la escasez de agua en entornos aislados
El Instituto Tecnológico de Canarias, en colaboración con la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (ULPGC), ha organizado un curso sobre desalación con energías renovables, con el fin de cubrir la ausencia de técnicos formados en esta tecnología mediante en energías limpias. El curso se imparte a partir del lunes 19 de abril en la Escuela de Ingenieros Industriales y Civiles de la ULPGC.
Expertos del ITC, la ULPGC, la ULL y el CIEMAT imparten las diferentes materias del curso, cuyo contenido se centra en las tecnologías más avanzadas de uso de energías renovables para la pequeña y gran escala de desalación, y en aquellos aspectos más innovadores, como los recientes avances en sistemas aislados de la red o el análisis del ciclo de vida y su aplicación en proyectos de cooperación internacional.
El Archipiélago canario conoce muy bien la problemática derivada de la escasez de agua dulce. La historia de nuestras islas contiene una sabiduría popular específica vinculada a la cultura del agua, a su obtención, almacenamiento, distribución y gestión. Con el transcurso de los años el proceso económico generó una demanda cada vez mayor de este imprescindible recurso; por ello, desde los años ochenta, Canarias comenzó a fabricar el agua dulce a través de la industria de la desalación. Hoy en día, más de un tercio del agua que consumen los canarios procede de la desalación; el caso más llamativo corresponde a Lanzarote, en el que casi el total del suministro de agua se produce en plantas desaladoras.
El inconveniente principal asociado a la desalación es su elevada demanda energética (eléctrica o térmica) que implica un consumo de recursos fósiles, el consiguiente incremento de la dependencia energética exterior y el impacto ambiental asociado. Una forma de superar esta problemática es el empleo de las energías renovables en el suministro energético.
Canarias tiene el privilegio de contar con cuantiosos recursos energéticos en forma de viento y sol; por ello es muy lógico emplear lo que nos sobra para conseguir lo que nos falta: alimentar las plantas desaladoras con energías renovables. El ITC, consciente de estas circunstancias, lleva investigando en estas tecnologías desde 1996. Por otro lado, las universidades canarias cuentan con profesorado experto en desalación, que imparten materias específicas para la docencia de los futuros técnicos.
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