Tras una larga batalla en defensa de las Dunas de Corralejo, el Ministerio para la Transición Ecológica confirma la caducidad de la concesión otorgada al Hotel RIU Oliva Beach en conformidad con el dictamen del Consejo de Estado.
Esta resolución es el resultado de los reiterados incumplimientos por parte de la cadena hotelera de unos requisitos claramente establecidos en la concesión que se les otorgó para ocupar las dunas. Entre ellas, construcciones ilegales que denunciamos en 2020, como una rotonda entre el hotel y los apartamentos, una carretera de acceso y el vallado y cerramiento de zonas públicas. Unas obras por las que el Ministerio para la Transición Ecológica multó a RIU por una infracción grave en 2022 y se les ordenó demoler las construcciones, orden que por supuesto incumplieron y se inició entonces el expediente de caducidad de la concesión.
No es la primera vez que en Canarias se derriba un hotel por no cumplir la legalidad, ya en 1988 el llamado Hotel Dunas fue demolido en las Dunas de Maspalomas por ocupar ilegalmente este espacio protegido tras una batalla judicial de 10 años.
Nuestra lucha no es contra RIU, no es contra el empleo ni es contra el progreso como seguramente escucharás decir. Nuestra lucha es en defensa del territorio y contra quienes escudándose en la creación de empleo hacen un uso privativo de nuestras costas y de nuestros espacios protegidos, saltándose la legalidad y perpetuando un modelo turístico absolutamente depredador que consume nuestro territorio y precariza a nuestra gente.
Esta resolución es la victoria de quienes defendemos estas islas y luchamos por un modelo turístico sostenible y respetuoso con nuestro entorno.
