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La avispa que come carne nos invade

Se llama Vespula germanica y no es de aquí. Es una avispa recién llegada que causa problemas en países donde ya es una plaga, y no sólo por comer abejas, sino porque muerde si la molestan.

JUANJO JIMÉNEZ

La Provincia, 15-1-2010

La avispa chaqueta amarilla o Vespula germanica ya está en Gran Canaria, tras expandirse por el mundo en los últimos cien años.

Por primera vez se ha podido detectar su presencia en un número significativo de individuos que acuden a las colmenas en verano y otoño, primero para abastecerse de proteínas en la puesta -que consigue comiéndose a las abejas, a las que dobla en tamaño, y a otros insectos endémicos- y luego en la fase de reproducción, en la que necesitan hidratos de carbono que logran de la miel, para lo que deben meterse en las colmenas.

El asesor de apicultura, criador y presidente de la asociación Abeja Negra Canaria, Orosman Burgueño, explica que «en los niveles actuales no debería representar una debacle para el sector», pero sí se deben tomar medidas cuanto antes «porque en un futuro puede llegar a ser un verdadero problema».

Un quebradero de cabeza que trasciende de la apicultura, porque lo que le priva a la chaqueta amarilla, también conocida como avispa carnívora, es precisamente la carne, como su apelativo indica, y su mordedura en los humanos, a los que también ataca, es especialmente dolorosa, llega a alimentarse de las heridas del ganado o animales domésticos y elimina a los insectos endémicos, con las consecuencias que esto acarrea a la flora local.

Existen trabajos como los firmados por la Universidad de Chile, país donde en los últimos 20 años se ha convertido en plaga, que consideran que «su erradicación no es factible», con nefastas consecuencias, como las de invadir zonas turísticas.

En Gran Canaria ha sido a finales de verano y otoño de 2009 cuando por las características favorables de las temperaturas de la estación han saltado las alarmas de los criadores. Tras la publicación en este periódico el pasado martes de la denuncia del apicultor José Florido, de Telde, la asociación que preside Burgueño ha recibido numerosas llamadas de más profesionales confirmando la presencia de decenas de individuos muertos en los piqueros, como se denominan las entradas de las colmenas.

En unos casos, en las colonias fuertes y saludables, las abejas son capaces de luchar contra el invasor, lo matan y expulsan. Pero no todas pueden con ellas, de ahí que Burgueño no descarte emprender una selección entre la especie Negra Canaria para crear otras generaciones más resistentes con capacidad para aguantar el embate.

La Vespula germanica pertenece a la familia de las Polistes spp, que comparte con la llamada avispa papelera, pero al contrario de esta última, la germanica es mucho más agresiva e incontrolable porque hace sus nidos en el suelo y son difíciles de detectar. Durante los inviernos muy fríos no se ven, a la espera de la primavera, cuando salen las reinas a formar nidos de hasta 10.000 ejemplares, con otras 270 reinas capaces de crear otros tantos avisperos.

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3 respuestas

  1. La fotografía que acompaña al artículo no corresponde a una Vespula germanica, sino a una Polistes dominulus o avispa papelera. Aunque parecidas en tamaño, la Vespula germanica es menos esbelta, más recia y más agresiva.

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