El periódico «El País» ha accedido a las grabaciones del 112 en la tragedia de la galería de Piedra de los Cochinos que demuestran la descoordinación de los servicios de emergencias
PEDRO H. MURILLO
El País, 21/08/2010
El 10 de febrero de 2007 un grupo de 29 excursionistas se disponían a disfrutar de una jornada de senderismo en el Monte del Agua, ubicado en el municipio de Los Silos (Tenerife). Lo que iba a ser un día de ocio se convirtió en una trágica pesadilla después de que confundieran uno de los senderos con una galería de agua. En esta cavidad volcánica, a casi 2 kilómetros de profundidad perdieron la vida seis jóvenes. La investigación judicial desveló que hubo una larga lista de negligencias y que el operativo de rescate fue deficiente. Tras cuatro años de aquel fatídico día que sobrecogió a Canarias, El País ha tenido acceso en exclusiva a las grabaciones realizadas por el Centro Coordinador de emergencias (Cecoes 112) en las que se demuestra que la logística del operativo de rescate dejó mucho que desear y que los servicios de emergencia no estaban preparados para un accidente de este tipo.
La voz de alarma fue dada por uno de los excursionistas y recibida por los servicios de emergencia a las 16:40 horas del 10 de febrero. En la grabación, el senderista, algo fatigado por la hipoxia, informa del estado en el que se encuentran sus compañeros atrapados en el interior de la galería de agua y su localización. «Hay una emergencia en una galería de agua. Estamos de excursión pero creo que nos hemos equivocado de galería. La gente le ha empezado a falta el aire y hay 26 personas dentro». En un primer momento, el excursionista alude a que se encontraban en la zona de Cuevas Negras y aporta el nombre de galería de Piedra de los Cochinos en Los Silos». En este punto, la operadora de emergencias le pregunta si disponen de agua y abrigo, un aspecto que ha sido criticado a posteriori por parte de los familiares de las víctimas ya que uno de los mayores peligros que acechan en una galería de agua no es la hipotermia sino la inhalación de gases mortales como el Co2 y la falta de oxígeno. Mientras el excursionista se encuentra a la espera, la operadora del Cecoes consulta a su superior quien le ordena derivar la llamada a los bomberos.
El senderista vuelve a repetir la información pero esta vez es mucho más concreto en cuanto a la situación crítica que estaban viviendo sus compañeros en el interior de la galería. «Hemos entrado a la galería supuestamente para salir al otro lado pero cuando llevábamos aproximadamente un kilómetro y medio, algo así la gente ha empezado a marearse, nos ha faltado oxigeno y no hemos conseguido avanzar y hemos querido seguir para llegar al otro lado pero no hemos seguido, no hemos encontrado la salida. Hemos dado la vuelta dos personas pero el resto sigue sin salir. Creo que hay gente muy muy débil que estaba mareada, cayéndose y se han sentado. Creo que no puede seguir. Entonces era para ver, no sé si existen galerías con equipos de oxígeno o hay alguien cerca». Ante los requerimientos del excursionista el bombero advierte que no existen equipos de oxígeno en las galerías de agua y le realiza una pregunta inexplicable: «yo lo que estoy viendo es que esto ha sido una media temeridad por parte ustedes. ¿Ustedes son de alguna empresa?». La respuesta del excursionista es negativa y continúan informando a los bomberos de la localización de la galería. «Nosotros hemos venido desde Erjos por varios senderos pero creo que desde Los Silos se puede llegar antes». Mientras tanto el bombero intenta que su interlocutor sea más preciso y el senderista apunta que la galería y el paraje en el que se encuentran es bien conocido por los vecinos del municipio de Los Silos. «De todas maneras, puedes preguntar en Los Silos por la Piedra de los Cochinos, barranco de Cuevas Negras». En este punto, el excursionista no puede ser más concreto pero insiste en que «desde Los Silos se puede subir por el barranco de Los Cochinos hasta la Piedra de Los Cochinos, hasta la entrada de la galería». Ante la imposibilidad de ser entendido por los bomberos, el excursionista apunta la posibilidad de que su móvil sea rastreado y determinar su localización por GPS. La respuesta de bomberos fue negativa: » no para nada, eso sólo es en las películas».
El calvario del rescate
Tras las llamadas a emergencias se pone en marcha el operativo de rescate. Los servicios de emergencia contactaron con la Policía Local de Los Silos pero sin concretar la posición exacta de los excursionistas. Los primeros efectivos de bomberos llegaron al lugar a las 18:30 horas. La magnitud del accidente obligó a movilizar al Equipo de Montaña de la Guardia Civil. Tras más de 20 horas soportando un calor infernal y sin botellas de oxígeno suficiente, en la madrugada del 11 de febrero, se rescataron los cuerpos sin vida de Estefanía P.F (22 años), Maurizio P.(29 años), Juan Luis M.T. (36 años); Eduardo D.D., (29 años); Javier D.S. (32 años), y Ginés R.A (25 años). Los familiares de las víctimas y los supervivientes de la tragedia siguen sin entender por qué falló la coordinación del operativo de rescate y sostienen que se produjo una verdadera ceremonia de la confusión y que los servicios de emergencia no supieron o no pudieron valorar la gravedad de la situación; una situación que fue demostrada por las investigaciones judiciales.
2 respuestas
Es lamentable que los servicios de rescate no estén tan preparados como debieran de estar. También es lamentable que el control y seguridad del medio ambiente no sea lo suficientemente bueno, Entre los tantos fallos de seguridad y coordinación el primero y mas importante es el de tener el acceso a pozos y galerías totalmente cerrados por cualquier sistema, además de tener un cartel informativo, donde se de a conocer sus características. El personal que atiende las emergencias que tenga un conocimiento elevado de las distintas situaciones de emergencia y tener conocimientos del territorio, saber por ejemplo que en las grutas o cavidades profundas la temperatura es de unos 13º. En una galería es mas probable la existencia de gases, por lo cual un rescate sin botellas de aire es bastante impropio y peligroso, con un tanque de aire de un volumen de 5 – 10 litros tienen autonomía entre 50- 100 minutos en un consumo medio de 20 litros/minuto. La coordinación base importante ya que bien programada resta tiempo en el rescate, de este depende la vida del rescatad@. También la disponibilidad del material adecuado, por ejemplo no es lo mismo desplazarse con un tanque de aire de 5-10 litros que con uno de 18 litros.
Aplaudo el comentario del señor Javier Godoy López.
Porque, habla usted de la necesidad del espaciomedioambiental y seguridad bien gestionados o controlados. Nunca deben estar industrias con riesgos abiertas, menos en la naturaleza.
Y, sin embargo sin existir esa seguridad se hace campaña propagandística de los senderos de Tenerife y Canarias.
Efectivamente si a un ñiño o niña se le da el mensaje dado por el joven alertante, nos sorprenderíamos de con qué rapidez, sapiencia, honradez y solidaridad pondría todos y cada uno de los medios necesarios para el rescate con éxito. Hagan la prueba. Yo la hice, y a los resultados me remito.
Mi hijo fue víctima con su novia, su amigo y 6 jóvenes más de la mala praxis política, de los organismos encargados de la seguridad y de actuar ante emergencias. Usted creo, que lo ha valorado todo con mucha honradez e inteligencia. Pero y qué opina el resto de la ciudadanía? Es obligación de todos y todas exigir para que no vuelva a ocurrir y demandar las dimisiones y sanciones contundentes.