* Reflexión de José Manuel Espiño Meilán, profesor, ecologista y escritor.
Dedicado a los socios del Colectivo Ecologista Turcón, a sus simpatizantes y a todas aquellas personas que valoran su incansable labor, que se alegran de caminar con ellos, de sentir la naturaleza y el patrimonio cultural, otra manera de ser miembros del Colectivo.
A punto de finalizar el año 2025, asisto a la última reunión del Colectivo Ecologista Turcón, en la sede que comparte con el Círculo Cultural de Telde, sita en el antiguo molino del Conde en la calle Roque del barrio de San Gregorio.
A la salida de la reunión me acompañan dos documentos bajo el brazo. El primero recoge, en formato de calendario de mesa, el Programa Anual de Actividades de Turcón, en su sección de senderismo -ver foto adjunta-.
Mes a mes, aparecen señaladas con un círculo amarillo las fechas en que se realizará la salida, el nombre del lugar y la ruta a recorrer y en la parte trasera de cada hoja, información detallada de la misma: historia, geología, flora, fauna, etnografía… Información que se complementará el día de la ruta con una hoja a todo color, con fotografías relevantes sobre la ruta ofertando en ella otros datos de interés.

Cuando analizo con calma este Programa calendario, observo meses que ofertan una salida y otros con dos. Observo también el viaje anual de verano, que en este año visitará parques nacionales y Patrimonios de la Humanidad de cuatro países: Austria, Alemania, Eslovaquia y Hungría.
El segundo documento es la Memoria de actividades del Colectivo del año en curso.
Es tal el trabajo anual que presenta, es tal la entrega y compromiso de sus miembros que si no dispusiera de una copia impresa de dicha Memoria, me sería del todo increíble dar crédito a lo que analizo y leo.
Ya el índice es un exhaustivo listado de intenciones. Parece imposible realizar tanta labor y en tantos lugares con tan pocos miembros, verdaderos activistas de la cultura y el medioambiente.
Pero así es.
Comenzaba el año dos mil veinticinco, con la publicación de la historia de cuatro décadas del Colectivo: “Memorándum de Turcón Ecologistas en Acción. Más de 40 años de vivencias, encuentros y luchas ambientales”.
Una publicación que a lo largo de cuatrocientas páginas narra la historia del Colectivo, cientos de luchas, denuncias, defensas, procesos judiciales, cientos de rutas programadas, cientos de actividades de educación ambiental, programas de radio, revistas, viajes, paneles, exposiciones… Tanta historia es imposible plasmar aquí, por ello le dediqué un artículo específico el dos de febrero del año pasado, justo tras su presentación a los medios y a la población, bajo el título: “Historia de una paloma” y al cual les remito si quieren abundar en el contenido de tal Memorándum, de libre consulta en la web del Colectivo.
Yo sigo con la Memoria anual.
Las IV Jornadas de los Ingenios Azucareros, 12, 14 y 15 de febrero con seis ponencias y una ruta de senderismo para interpretar Los Picachos y los acueductos de Telde, poco dicen de la actividad generada durante tantos años para conseguir la titularidad pública del recinto donde se encuentran, ni de la excelencia de sus ponencias y debates.
La ejecución del Proyecto: “Activa tu compromiso por la naturaleza: de la concienciación al compromiso”. Durante el año se trataron los siguientes objetivos:
• Proponer espacios/foros abiertos al debate.
• Promover iniciativas de participación ciudadana.
• Fomentar la innovación social y ciudadana.
• Mejorar el asociacionismo.
• Exploración del medio que nos rodea.



Las acciones y actividades realizadas superan el medio centenar, en conjunción muchas de ellas con más de una veintena de Grupos ecologistas, asociaciones culturales, asociaciones vecinales, plataformas canarias, foros, Círculo Cultural. Esto ha supuesto una mayor eficiencia, la llegada a miles de ciudadanos y el desarrollo de propuestas culturales y medioambientales conjuntas. En suma, se ha multiplicado la difusión y el trabajo del Colectivo. Es ésta una de las razones del porqué de un resumen anual de actividades que difícilmente encontraremos realizado por instituciones públicas que sí tienen la obligación de programar y llevar a cabo estrategias de divulgación, formación y encuentros con el medioambiente y los valores inherentes a sus espacios naturaleza y culturales.
Actividades y charlas realizadas en el Círculo Cultural de Telde:
Una cada mes y algún mes con dos (septiembre) o con tres (junio)
Más de 50 artículos de prensa.
Más de un centenar de notas de prensa y otros comunicados.
Más de 50 artículos de educación ambiental y divulgativos.
Ejecución del Proyecto: “Jornadas de puesta en valor del patrimonio cultural inmaterial: Cruces del Camino que guardan Historias, en el ámbito del paisaje cultural de Risco Caído y las montaña sagradas de Gran Canaria y de la Reserva de la Biosfera de Gran Canaria”.
Ejecución del Proyecto: “Impulsamos el cambio. Partiendo de El despertar de la conciencia ambiental: educación y sensibilización para llegar a la acción y el compromiso.
Para ello el proyecto se trabajó en cuatro bloques:
• Bloque de sostenibilidad ambiental.
• Bloque de sostenibilidad social.
• Bloque de sostenibilidad económica.
• Bloque de transversalidad.
Desarrollo de las 3ªs. Jornadas de Medioambiente en Jinámar
2ª Ruta de participación vecinal. Árboles de Jinámar.
Ejecución del Proyecto: “Arqueorutas. Un patrimonio a la vista”.
Se realizaron 9 rutas guiadas sobre patrimonio arqueológico.
Se dieron 8 charlas divulgativas sobre patrimonio arqueológico.
Se programaron 4 Rutas de exploración sobre patrimonio arqueológico.
Desarrollo de las “Jornadas científicas de patrimonio cultural y etnográfico de Las Palmas de Gran Canaria, con especial significación en los territorios de La vega de san Lorenzo y Tamaraceite”.
A lo largo de tres intensos días se realizaron catorce ponencias, se desarrollaron dos mesas coloquio y una ruta de senderismo.
Se realizó un Concurso de fotografía: “Miradas sobre el patrimonio”.
Se llevaron a cabo las “Jornadas de Medio Ambiente y el arbolado en Jinámar”.
Charlas, ponencias, mesas de trabajo y plantación en el CEIP José Tejera.
Veinte rutas guiadas, las presentes en el Programa de senderismo y otras que surgieron a lo largo del año, bajo el epígrafe: visitas a la naturaleza y al patrimonio cultural.
A lo largo del año se llevaron a cabo una docena de denuncias referidas a agresiones ambientales, paisajísticas, etnográficas que a su vez tenían más de un proyecto en tramitación. Por ejemplo: la oposición sistemática a la instalación de placas solares sobre suelo rústico.
Más allá de los comunicados y las notas de prensa, radio y televisión, Turcón ha consolidado y ampliado su difusión a través de la mejora de su blog, ahora web site y la ampliación de las redes sociales: Instagram, Facebook, Youtube.
15 reuniones y asambleas de Turcon en su sede.
Mas de un centenar de: reuniones de coordinación con asambleas vecinales, de asistencia a programas de radio, de participación en simposium, de reuniones para la defensa del patrimonio, de encuentros de coordinación, de participación en programas de televisión canaria, de jornadas de exploración, de asistencia al Consejo Federal de Ben Magec, de asistencia a presentaciones de libros, de manifiestos, de charlas, de visitas a jardines, de talleres, de ruedas de prensa, de plantaciones, de ciclos, de jornadas, de asambleas, de repoblaciones, de actos, de participaciones, de encuentros …
Son las tres de la mañana del día 27 de diciembre. Deseaba hacer este artículo justo después de la reunión y la celebración de un año más de activismo.
Desde las siete y media hasta las diez y media de la noche se desarrolló la última sesión del Colectivo para este año.
En un pis pas se desmontó el salón preparado para una reunión de socios y surgieron en su lugar las mesas con viandas y bebidas, manteles y servilletas.
Se relajó el ambiente y asomaron los saludos y las sonrisas. Fue el momento de las felicitaciones, los abrazos, el encuentro sosegado de buenos amigos, de grande amigos, de compañeros de tantos años en una relación consolidada donde su mejor activo ha sido su reconocimiento como familiar, entrañable, cómplice.
Hablaron de ir a descansar pero nadie se iba, hablaron del compromiso del día siguiente, a las diez y media en el viejo colegio de Clavellinas, para recoger pancartas y cruces, para organizar la manifestación y la cadena humana que se celebraría a las once horas en la playa de Salinetas.
Y hablaron del manifiesto en el Ayuntamiento, que se presentaría y leería unos días más tarde.
Y entonces comprendí que el corazón que impulsa al movimiento ecologista de Turcón es inagotable porque tiene decenas de corazones latiendo al unísono.
Entendí entonces el porqué de la extraordinaria reunión a la que acababa de asistir y que se había desarrollado sin apenas darnos cuenta, a lo largo de dos horas y media, más o menos, de 8 a 11 de la noche, de la perfecta sincronización observada, de la exquisita exposición de todos y cada uno de los puntos del día, gestionados por el secretario y la presidenta del Colectivo.
Y no puedo negar lo que no pude hacerlo allí, la enorme satisfacción de estar presente como socio de honor en un Colectivo capaz de llevar a cabo una labor anual tan ingente, con una Memoria de Actividades que ha colocado en mis manos su Presidenta y que tiene más de un centenar de páginas.
Faltan algunos miembros a esta reunión, unos porque están de viaje, otros con sus familias por motivos navideños, otros porque no pudieron asistir, pero aquí se encuentran una veintena de ellos. Es posible que sean treinta los que de una manera activa y continua desarrollan una labor tan extraordinaria a lo largo del año.
Aplaudí allí, en el salón de actos tan encomiable labor, expresándoles mi gratitud eterna y mi satisfacción e indiscutible orgullo por pertenecer al Colectivo que con tanto cariño se forjó en mi cabeza hace tantos años, en mil novecientos ochenta y dos -me acabo de enterar que la primera acta fundacional ha aparecido y está firmada con fecha de mil novecientos ochenta y uno y que el compañero Álvaro Monzón tiene una copia de la misma- amparado en las ilusiones de un buen grupo de niñas y niños.
Y aplaudo ahora con estas palabras escritas, a un Colectivo de seres humanos sin cuya presencia el medioambiente canario y la cultura de la tierra no gozarían del amparo, difusión y defensa que se merecen.
Felicidades Turcón, en un horizonte no tan lejano vislumbro medio siglo de existencia. El grado de amistad y compromiso observado lo garantizan.
* José Manuel Espiño Meilán, amante de los caminos y de la vida. Lector, escritor y educador ambiental.








