La nieve es un foco de atracción. La ciudadanía acude en masa a las zonas montañosas para disfrutar de
la nieve y de nuestra rica naturaleza.
Es un buen momento para recordar los mensajes de seguridad y…, sobre todo, de conducta cívica y respeto con la naturaleza.
Aquí unas breves indicaciones:
Los diez mandamientos del buen senderista:
- La basura, mejor en la mochila y al contenedor.
- El coche, siempre que se pueda, en el garaje.
- Póntelo, úsalo y, por favor, llévatelo.
- El fuego, solo en la cocina.
- Si quieres tatuar, mejor en tu piel.
- Por supuesto, no robarás.
- Las manos en los bolsillos y las flores en su sitio.
- El botellón, en el bodegón.
- Dormir, mejor con permiso.
- Amarás al bosque como a ti mismo.
PARA ESTOS DÍAS DE NIEVE… tener en cuenta lo siguiente:
- Infórmese, previamente, de las previsiones meteorológicas.
• Cuente siempre con la vestimenta y calzado adecuados.
• Proteja especialmente piel y labios de los rayos solares.
• No sobrevalore su energía ante la montaña.
• No practique deportes no conocidos si no es bajo la dirección de un monitor.
• Respete la señalización.
• No se aproxime nunca a los precipicios aunque aparentemente sean seguros.
• Evite transitar por lugares con placas de hielo.
• No abandone la línea de cumbre.
• No se acerque a laderas y pendientes.
• No utilice jamás plásticos ni otros elementos para deslizarse por laderas nevadas o heladas, provocan graves lesiones.
• Preste especial atención al equipamiento de los niños.
• Cuide el entorno.
• Lleve en el coche cadenas, una pequeña pala y mantas.
• Es recomendable llevar teléfono móvil así como dispositivo de alimentación de energía para el mismo.
Ante cualquier emergencia llame al 1-1-2.
Normas, conductas y recomendaciones GENERALES:
Visitar los abruptos barrancos, las montañas, los lomos y laderas, los escarpes rocosos y, en definitiva, los espacios naturales y culturales es, sin duda, una actividad placentera. Pero atención: si no se toman las debidas precauciones, puede convertirse en una experiencia triste y desagradable.
Es muy importante tener siempre presentes unas reglas básicas de seguridad que nos sirvan de autoprotección ante eventuales situaciones de riesgo. A continuación se enumeran algunas de ellas:
- Nunca salga solo, intente ir siempre acompañado.
- Prudencia e inteligencia son los ingredientes necesarios para disfrutar de la montaña con seguridad. La prisa, el empecinamiento, la ofuscación o el agotamiento no son buenos compañeros de actividad. Hay que saber renunciar a tiempo.
- Cuando el mal tiempo nos sorprende, lo fácil se vuelve difícil y ciertos peligros aumentan: caídas de piedras y árboles, descargas eléctricas, dificultad en la orientación, enfriamiento, fatiga física y moral… Por ello hay que mantener la calma, dosificar las fuerzas y prever con antelación los cambios meteorológicos.
- No abandone ni entierre la basura: llévesela a donde haya un servicio de recogida diaria. Su única huella debe ser la de sus botas.
- No acampe por libre, respete los lugares de acampada, las señales existentes y a los agentes que velan por la naturaleza y la seguridad de todos.
- Arrancar flores y ramas está prohibido: deje que los demás disfrutemos de ellas. Tampoco debe molestar a los animales. Si lleva algún animal de compañía, habrá de ir siempre atado.
- Respete las propiedades privadas, entre las que se incluyen los cercados plantados. No robe frutas, ni utensilios-aperos de labranza. Pase con sigilo por los caseríos, sin perturbar la tranquilidad de las gentes de nuestros campos. No rompa la armonía del entorno y no moleste a quienes queremos disfrutar de la paz y el sosiego de la naturaleza.
- No olvidemos dar las buenas horas y saludar a la gente del campo. Al cruzarnos con los lugareños, debemos recordar que en el campo todo el mundo se saluda. Así pues, no rompamos esa cordialidad y buenas prácticas de convivencia.
- Respete y cuide las fuentes, los cursos de agua, los riachuelos… Nunca vierta en ellos jabones, detergentes, productos contaminantes o residuos.
- Tenga mucho cuidado con el fuego. No lo encienda nunca y jamás tire colillas en los caminos.
- Procure no salirse del sendero indicado. Respete el trazado y no tome los atajos, que estropean el camino original, deterioran el suelo aumentando la erosión y son más peligrosos y agotadores por su pendiente.
- Visitamos muchos Espacios Naturales Protegidos cuya regulación está en continua actualización. Por ello se aconseja siempre estar informado y tener entre nuestros “favoritos” la página web del Gobierno de Canarias, donde podremos encontrar las leyes y los planes que afectan a cada lugar.
Anótela: http://www.gobcan.es/cmayot/espaciosnaturales/index.html
- Y, finalmente, comprométase en la defensa del medio natural con el ejemplo.