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La medida afectará, entre otras, al tramo de León y Castillo, desde San Pedro Mártir hasta la esquina de Pérez Camacho, y a las calles de Placentilla, Don Esteban, Doramas, Doctor Chil, Conde de la Vega Grande y Comandante Franco, que permitirán el tráfico rodado a residentes y transporte público.
La Concejalía de Patrimonio Histórico del Ayuntamiento de Telde ha proyectado la peatonalización de diversas calles en torno al espacio público de la plaza de San Juan. El borrador técnico de esta iniciativa se presentará en el plazo de un mes. Entre otras, el tramo de León y Castillo, desde San Pedro Mártir hasta la esquina de Pérez Camacho, y las calles de Placentilla, Don Esteban, Doramas, Doctor Chil, Conde de la Vega Grande y Comandante Franco, que permitirán el tráfico rodado a residentes y transporte público.
Así lo anunció ayer el titular de esta delegación, el nacionalista Ildefonso Jiménez, durante la presentación del proyecto de rehabilitación de la plaza de San Juan.
Con un plazo máximo de ejecución de un año, la obra de rehabilitación de la plaza que lleva a cabo la empresa adjudicataria Comsa (con la financiación de 1.398.969 euros por parte del Cabildo) contará con la supervisión del mismo arqueólogo que ya ha trabajado en otros proyectos en la plaza de San Juan. Al levantar el actual pavimento cabe la posibilidad de que se encuentre material arqueológico con valor patrimonial, como ha ocurrido en otros espacios antiguos e históricos como éste. Este tipo de hallazgos retrasaría la terminación de la obra, según publica hoy Canarias7.
El consejero insular de Cooperación, Carmelo Ramírez, que visitó ayer el enclave, dijo que se trata de un impulso para recuperar el entorno. Con la restauración se recupera la antigua alameda donde se inscribirán los nombres de todos los barrios.
Se respetará la morfología actual de la plaza de San Juan», anunció ayer en la presentación de los detalles del proyecto de rehabilitación el director de la obra, Ignacio Villegas. Bajo la nueva piedra vietnamita que sustituirá el actual pavimento hundido y deteriorado del recinto se colocará una base de hormigón para evitar filtraciones de agua, procedentes del riego de los laureles de indias, que permanecerán intactos. De esta forma además de restaurar los elementos deteriorados y eliminar deficiencias como la falta de estabilidad del muro y los problemas de accesibilidad, se refuerza la instalación pública.