58 participantes realizaron ayer, sábado, la ruta establecida en el programa anual de actividades de Turcón.
Consistía el itinerario en visitar el caserío de Guardaya de Abajo y el Fondillo de Tejeda. Un total de 12 km, que los senderistas realizaron en cuatro horas y medias, netas de caminata.
GUARDAYA DE ABAJO, GUARDAYA DE ARRIBA, LLANOS DE GUARDAYA Y MONTAÑA DE GUARDAYA.
Cuatro zonas que visitamos, aunque el lugar más idílico es el primero, Guardaya de Abajo, a unos 860 metros de altitud con respecto al nivel del mar, y presidido por las altas cumbres de la Montaña de Artenara (1.477 m.a.), Montaña de Tía Bernarda (1.587 m.a.) y Cueva Caballero (1.600 m.a.), auténticos “acantilados” que protegen a este caserío por su lado norte. Estas paredes destilan agua y probablemente sería una explicación para entender la ubicación del caserío y de sus primeros moradores. Otra cosa que sorprende es que Guardaya de Abajo pertenece al municipio de Artenara y el resto, a partir del Barranco de Juan Fernández, al vecino municipio de Tejeda.
El nombre de Guardaya evoca agua y montaña. Nos tenemos que fijar en algunos diccionarios de nombres aborígenes para interpretar exactamente el significado de este vocablo. Como hemos dicho en anteriores publicaciones la toponimia es el lenguaje del territorio, y así nos acercamos a un lugar abrupto, donde las montañas protegen el agua que dio vida a Guardaya.
Guardaya, en su época más esplendorosa donde, seguramente, alcanzó su poblamiento más numeroso, disfrutaba de agua permanente y de manantiales que regaban sus campos, además de mitigar la sed de todos los seres vivos de la zona.
El cronista oficial de Artenara, en su publicación sobre la toponimia, cita para Guardaya un total de nueve topónimos referidos a la existencia del agua: Barranquillo de La Fuente, Barranquillo de Los Manantiales, Los Caideros, El Canalizo, el Chorro, la Fuente Blanca, Bajo del Chorro, Barranquillo de los Charquitos y Los Ñamitos (del vegetal Ñame que requiere agua permanentemente). Pero si esos nombres vienen de antaño, ahora el visitante encontrará un vergel de palmeras canarias que probablemente se alimentan del agua que corre aún por las entrañas de Guardaya.
Guardaya de Abajo es un caserío perteneciente al municipio de Artenara. No es fácil llegar allí. Requiere muchas horas de viaje y quizás eso le haya convertido en un paraje salvaje y alejado de la civilización donde crece la vegetación silvestre propia de la zona. Si queremos caminar, debemos descender por los caminos que parte desde el mismo centro del pueblo de Artenara. Varios caminos se descuelgan vertiginosamente hacia la pista de tierra de Guardaya, que comunica Tejeda con Acusa.
Próxima actividad: aula de la naturaleza de Osorio, los días 2 y 3 de abril de 2011.
Próxima ruta: Presa de Siberio, sábado, 30 de abril.
Más información en : turconsenderismo@gmail.com